Txell Alarcón, una temporada para el recuerdo y un ilusionante verano por delante
La alero catalana participa en la concentración de la Selección Española U20F, que se encuentra reunida en Azuqueca de Henares en una pequeña concentración que sirve como antesala de lo que se viene en verano: el Europeo de Sopron. Un reto apasionante que llega tras la temporada de su asentamiento en LF Endesa.
ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Será difícil que en Logroño olviden la temporada del Campus Promete. Una primera vuelta de ensueño hizo soñar al equipo con la Copa de la Reina y la regularidad de la plantilla durante el segundo tramo de la competición dejó al equipo cerca de los Playoffs. Unos objetivos lejanos a los que se planteaban al comienzo del curso y que giraban en torno a la permanencia. Son muchos los factores que han llevado a este equipo a superar las expectativas pero parte de culpa recae sobre la alero nacional Txell Alarcón (2003) .
Alarcón ha completado su segundo curso en LF Endesa de la mano del conjunto riojano y lo ha hecho dando un paso adelante en cuanto a minutos y responsabilidades. Así, ha finalizado el curso con una media de 4.8 puntos (35% en TC), 1.9 rebotes y 3.3 de valoración en más de 20 minutos de juego por encuentro.
Tras una campaña de mucho crecimiento, la jugadora prepara nuevos retos ilusionantes como el de poder estar en el Europeo U20 con la generación del 2002. “Tuvimos la suerte de jugar el Mundial pero la pandemia nos ha fastidiado muchísimo, estos campeonatos son momentos únicos y nos los hemos perdido, así que lo que vamos a intentar es disfrutar todos los que nos queden”.
¿Qué tal va la concentración? ¿En qué se está centrando el trabajo?
Bien. Estamos poniendo la base para este verano poder competir el máximo posible. Nos está sirviendo como una primera toma de contacto y estamos mejorando con el paso de los días. Hacía muchísimo tiempo que no veía a las que están en Estados Unidos, así que es genial volver a estar todas juntas otra vez.
Esta generación del 2002 tuvo la oportunidad de jugar la Copa del Mundo U19 el año pasado ¿de qué sirvió aquella experiencia?
En mi caso, me sirvió para entrar en el grupo. Nunca había estado con las mayores y fue una experiencia para crecer de cara a este año poder competir por todo lo que podamos. Pusimos unas bases, conocimos nuestros roles y lo más importante, hicimos grupo humano fuera de la cancha.
¿Cuál crees que es tu rol en este grupo?
Creo que mi rol es el de tiradora, pero también de defensora. En el Mundial del año pasado, por la exigencia física de los rivales, todas nos vimos obligadas a dar un paso adelante en defensa.
¿Una U20 sabe a despedida?
Somos varias de la generación del 03 o del 04 y para nosotras es muy especial poder acompañar a las del 2002 en su último año. Ahora no nos sabe a despedida porque acabamos de llegar y estamos disfrutando mucho ahora, pero se respira un ambiente especial.
El covid ha dejado muchas competiciones internacionales de cantera sin celebrar. ¿Cómo os lo tomáis?
A mí generación, la del 2003, la pandemia nos dejó sin Mundial U17 y sin Europeo U18. Pude jugar el Mundial U19 con otra generación pero fastidia mucho. En estos torneos se viven cosas muy únicas. Ahora vamos a intentar aprovechar todos los campeonatos que nos quedan, pelear por poder estar en todas las competiciones posibles y sobre todo, disfrutarlas.
Todo el año en LF Endesa y ahora pones el modo selección. ¿Ves mucha diferencia?
No. Cada entrenador es un mundo y a nivel de ejercicios hay diferencias, pero no hay muchas diferencias porque aunque la exigencia de las jugadoras de LF Endesa es mucha, mis compañeras de esta U20 también entrenan a un nivel muy elevado.
¿Qué crees que te aporta jugar con una generación superior?
En esta categoría los entrenadores te explican muchas cosas. Aquí sabes para qué trabajas, por qué trabajas y cómo vas a usar lo que estamos viendo ahora en el campeonato. Pero lo bueno es que las ideas son las mismas. En la Selección, desde la primera concentración ya conoces la filosofía y aunque cambies de generación o de entrenador y las dinámicas puedan ser distintas, esa filosofía se mantiene. Eso facilita ir de una generación a otra sin problemas.
¿Qué destacas de esta temporada con el Campus Promete?
Creo que competimos mucho. Cada vez que terminamos un partido lo hicimos con la sensación de haber competido al máximo tanto con los rivales de nuestra liga como con los de arriba. Incluso, le ganamos al Spar Girona en casa. Creímos en la clasficiación para la Copa de la Reina, también en los Playoffs aunque nos quedamos más lejos. Pero sin duda lo mejor ha sido el genial grupo humano que formamos y que nos ayudó a casi llegar a unos objetivos, que en realidad no eran los que nos habíamos planteado al principio de la temporada.